Estimados lectores, en la carta de la semana pasada una amiga me preguntaba cómo podíamos encontrar nuestro propio yo.
Estuvimos analizando el poder que uno tiene dentro de sí, y cómo lo podemos encontrar. Mencionamos que hay una receta espiritual para el crecimiento y el cambio. Y esa es la que ofrezco hoy.
Comienzo por comentarles los pasos pasivos para poder tomar los activos.
Estos que ofrezco son los que yo fui asumiendo para hacer cambios profundos, que me llevaron a una vida más concectada con mi interior.
Son los siguientes:
- Meditación. Es un ejercicio que reduce el estrés, calma y aclara la mente y nos lleva al conocimiento propio y la revelación. Empezamos a ver nuetra relación real con el Ser Supremo y comenzamos a ver quiénes somos realmente. Empezamos a visualizar cuáles son nuestros obstáculos, a escuchar con claridad la voluntad de Dios, y a encontrar paz en nuestro santuario interno.
(Si no creés en Dios, encontrarás la fuente del poder)
Esto nos lleva a los llamados pasos activos.
- Al aceptarnos tal como somos, tal como nos vemos, podemos perdonarnos y perdonar a los demás y así nos desligamos del ayer. Abandonamos el pasado, comenzamos a sanarnos.
- Comenzamos a visualizarnos en una luz más segura, y creamos nuevos reflejos positivos.
Así creamos y afirmamos una nueva imagen con la cual abrazamos nuestro nuevo ser.
Paramantenernos así tenemos que continuar la visualización, imaginándote inteligente, visionaria, humilde y bondadosa. Cuando alcances estos propósitos habrás reemplazado todas tus debilidades y tus temores, con fortalezas.
Lo lograrás amiga. Confia en ti. Doctora Isabel