Hola doctora Isabel,
Para mi escucharla es sanar y alimentar mi alma de paz.
Necesito de un consejo suyo, tengo 40 años y desde que tengo uso de razón nunca me he sentido amada por mi madre, con el paso de los años aprendí a vivir con ese vacío. Ahora estoy casada por segunda vez y tengo 3 hijas, una de mi primer matrimonio y dos ahora.
Mi pregunta Doctora es por qué ahora me duele más el recuerdo de la indiferencia y desamor que siempre a tenido
conmigo?
Más cuando mis hijas me piden que les platique cómo era su abuelita con migo cuando yo era niña…y no me puedo controlar, automáticamente lloro y me siento tan mal no sé que decirles y les digo que su abuela ha sufrido mucho que la tratemos lindo. Pero ellas me hacen preguntas como por qué mi abuela no te viene a ver y otras similares y no quiero ya sentir ese dolor más. Nunca fui un orgullo para ella, ayúdeme por favor…
Dios la bendiga y muchísimas gracias.
Hola amiga:
Gracias por escucharme en el programa, y gracias por escribirme, pues al tomar ese paso, estás dando señal de que quieres tomar una decisión, la de no continuar sufriendo más por esa causa.
Hay un gran número de personas, sobretodo mujeres, que no se han sentido jamás amadas por su madre.
Me tomo la licencia de decir que son legiones de mujeres.
El por qué, puede ser el resultado de una sociedad que más bien en el pasado, no le dio valor a la mujer, y sí al hombre. Pero quién sabe las razones por las cuales tu madre no ha sido ni es una mujer amorosa contigo. Creo que es hora, que con tacto y cariño les respondas a tus hijas. Que les digas que realmente no sabes la razón por la cual tu madre no ha sido cariñosa conmigo, ni sabes por qué no te visita, pero a la vez les pides que si algún día viene, sean cariñosas y respetuosas con ella.
No conozco las razones por las que tu madre no se siente orgullosa de ti. Realmente si tu eres una buena madre y te ocupas de tus responsabilidades, no necesitas la evaluación de tu madre para sentirte bien contigo misma.
Las mujeres que han logrado sobresalir en la vida, no todas han tenido una niñez maravillosa, ni padres que las han amado. Son mujeres que han encontrado dentro de ellas mismas una comprensión de lo que realmente son, un reconocimiento de las bendiciones que han recibido, y una dedicación a una buena causa. Esto les empuja a olvidar ese pasado, agradecer y vivir su presente. Hazlo tú, cada mañana, rézale a tu Poder Supremo, a tu Dios, y agradécele lo que te ha dado, por ejemplo tus 3 hijas, y ofrécele algo especial para ese día.
Quizás puedas hacer algo por los demás, por tus hijas, por un vecino, en Su Nombre. Esto cambiará tu vida, y llenará los vacíos de tu corazón.
Que Dios te bendiga